Promover programas educativos en escuelas, centros comunitarios y medios locales para concienciar sobre la gestión adecuada de desechos y sus consecuencias.
Establecer programas comunitarios de reciclaje y compostaje, proporcionando contenedores y educación sobre cómo reciclar y compostar.
Incentivar el uso de envases reutilizables y eliminar gradualmente el uso de bolsas plásticas de un solo uso.
Organizar jornadas de limpieza comunitaria regularmente para recoger desechos y sensibilizar sobre la importancia de mantener el entorno limpio.
Opta por medios de transporte más sostenibles, como caminar, andar en bicicleta o utilizar el transporte público en lugar de los vehículos privados. Esto ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación del aire.
Implementar sistemas de gestión adecuada para desechos peligrosos y facilitar su recolección y disposición segura.